Pareciera estamos convencidos lo que observamos de nosotros mismos es lo que somos y la sociedad nos quiere hacer creer.

Según estas hipótesis nuestro criterio de realidad; «eso que pensamos somos», estaría linkeado automáticamente con una realidad ilusoria, como una computadora programada, que nos iría estimulando a cada momento para hacernos creer que nuestra identidad sería lo que hacemos o mostramos socialmente en nuestra vida cotidiana.

Alguna vez te hiciste la pregunta:

¿ Quién Soy Yo ?

Las primeras respuestas que posiblemente vendrán a la mente serían; Tu nombre, apodo o bien las actividades que desarrollas, quizás: Empleado, Profesor, Médico, Psicóloga, Arquitecto, Político, Vendedor, Peluquera, Maestro, Periodista, Estudiante, Ingeniero, Empresario, Técnico, Administrativo, Abogada, Ama de casa, Secretaria, Chofer, Militar.. etc. (Estereotipos-Etiquetas sociales)

Pero conjeturo no se trataría de lo que conocemos o sabemos de nosotros mismos, relacionado con lo que hacemos en nuestras actividades diarias. Tampoco sería de quien figura en nuestro documento de identidad, o apelar al; «soy esto que ves» por lo físico–Biológico.

En tal contexto, la hipótesis sería: adentrarnos a responder algo más complejo y profundo (introspección mediante), desde donde deberíamos inevitablemente sentir una rara sensación de vacío, por no encontrar respuestas inmediatas de manera lógica – racional como solemos hacer, pero justamente ahí estaría el meollo de la cuestión: ir descubriendo ese digno y misterioso camino que nos conduciría hacia una Auténtica Identidad.

Al menos por unos instantes poner en pausa eso que creemos saber de nosotros y sobre lo que observamos.

Darle descanso a la cabeza, del bombardeo de estímulos cotidianos. Intentando percibir – sentir, dar lugar a nuestra sensibilidad profunda donde habitan inéditas sensaciones, emociones que nos hablan otro idioma, como una guía de algo hasta ahora desconocido y funcionaría a través de un proceso, de la mano de la intuición, que a veces suele anticiparnos o predecirnos una realidad por venir, pudiendo desde otro lugar ir tomando decisiones con valentía y dignidad.

Conjeturo, al no soportar esas sensaciones en nuestro cuerpo y el miedo a lo desconocido, incertidumbre por lo profundo y misterioso que late en nosotros, es que preferimos utilizar máscaras de identidad y/o corazas que llevan estampadas sólo lo conocido, como un reflejo de esa realidad aparente que se nos impone, con las que nos vamos cubriendo a lo largo de nuestras vidas para mostrarnos y agarrarnos de algo que supuestamente nos daría un sustento social, convencidos de nuestras creencias, haciendo de ellas verdades absolutas..

Quizás cayendo en el típico: Así soy o es lo que me toca Ser.

Por un lado el predominio de nuestra mente que conjeturo quiere mantener el control absoluto sobre nuestros actos, provocando sustos que van clausurando el adentrarnos a descubrir algo auténtico, más genuino de nosotros mismos, alejándonos de la posibilidad vital de percibir y reconocer a un prójimo y, por el otro, esa necesidad (sin darnos cuenta) de saciar los vacíos de identidad. Entonces buscamos y nos ofrecen socialmente esas caretas, creyendo así iremos encontrando respuestas y/o soluciones profundas en nuestras vidas. Provocando ir utilizando una máscara distinta según la ocasión, si , como el camaleón, que posee células en sus capas que le permite camuflarse, así adaptarse al medio ambiente. En nuestro caso habría que reemplazar esa células, por creencias y conocimiento adquirido, a los fines de alcanzar un reconocimiento y validación social así definir y convalidar lo que creemos Somos.

Este podría ser un vital comienzo, reconocer nos da terror mostrar algo de nuestra auténtica esencia – que aún desconocemos-, y tendría que ver con lo más sano y digno del Ser humano, ello estaría en nosotros adormecido, pero que deberíamos ir despertando y descubriendo, transitar un inédito camino hacia nuevos desafíos de lo que podríamos Ser.

Como resulta desconocido para nuestra mente adentrarnos a esos misterios, es que preferimos ir forjando nuestra identidad por imitación e identificación con el otro y, –sin darnos cuenta -, así nos vamos creyendo que somos lo que vemos y nos dicen, en función de grupos de pertenencia o creencias, donde nos aplaudimos y convalidamos entre nosotros mismos los pensamientos narcisistas, convencidos que así vamos a Ser alguien, dejando de lado la autenticidad, el poder pensar desde nosotros, así ir dando lugar a una inédita realidad que habita en nuestras inasibles profundidades.

Entonces, nuestro pensamiento puesto al servicio de una realidad virtual, cotidianidad desde donde afloran nuestras creencias y narcisismos que vamos defendiendo en la vida a capa y espada; estructuras que construimos en función de las siguientes hipotéticas «Caretas Sociales» que vamos adoptando:

Te animarías a reconocer cual de las siguientes Caretas sueles utilizar ? ;

• Careta Dogmática, sean; Familiares, religiosos, económicos, Militares, Educativos, fundamentalistas, corporativismos, Sectarismos, etc: Cuando se expresan, sin darse cuenta se creen dueños de la verdad absoluta y de la realidad, de pensamientos y sentimientos impenetrables, donde no habría misterios, interrogantes o enigmas por develar, según la doctrina ya estaría todo creado y revelado, actuando como guardianes de esos postulados. Se manejan como rebaño o manadas en función de sus soberbias creencias, generando sin darse cuenta, relaciones de sometimiento y complicidad, desconociendo ello se viene naturalizando desde cientos de miles de años.
  • El cual promueve esas caretas y corazas de identidad tan duras-rígidas, desde donde lo que piensan (inamovible) es su única realidad, alejando así cualquier atisbo de autenticidad y genuina creatividad. Y quien no puede ser adoctrinado para ese grupo de pertenencia-creencia, es considerado un hereje.

• Careta Sabiduría: Personas que hacen de la sabiduría su estandarte de vida; adquirir y acumular conocimiento continuo a modo de consumo, y una incesante necesidad de etiquetar la realidad, de criterio puro y objetivo, donde la subjetividad se omite. Promoviendo así pseudo identidades, muy individualistas consumista del saber, de un consumo que los consume, cuya inteligencia tiende a repetir y/o fotocopiar los conocimientos. Al punto tal de considerar más inteligente a quien mejor y más rápido repite de memoria lo aprendido. Esto nos lleva a ignorar y marginar los procesos mentales que conducirían a una inteligencia más profunda y auténtica, que conectaría con una genuina creatividad, a fin de recrear conceptos desde nosotros mismos. Así, se va generando a través de la supuesta libre competencia una feroz lucha individualista por el ir tras la zanahoria del éxito y poder, desde donde subyace en el 99,9% decisiones fundadas en lo económico, y surgiendo desde allí los parámetros de éxito, fracaso, felicidad etc.
  • Transmitiendo este tipo de pensamiento conformando una Careta Sabia-Burócrata, de mucho conocimiento adquirido pero vacíos de Ser, que buscan saciarse desde ese consumir constante del saber y cultura, consolidando así sistemas que se van arraigando en lo más profundo de las estructuras sociales, convalidando un estilo de vida, si es que puede llamarse vida, que va marginando cada día más una genuina creatividad., ligada al 90% de neuronas que no utilizamos.

• Careta Tecno: Quienes sobrevaloran la técnica, su pensamiento gira en torno a un razonamiento lógico, mecánico-tecnológico, como algoritmos cargados en un sistema que nos permiten acceder rápidamente, como un click del mouse a respuestas o soluciones linkeados a la base de datos del cerebro. Pero serían pensamientos racionales y puramente objetivos de la realidad. Programados así para pensar menos y hacernos la vida más fácil a modo de una computadora, o robots que carecen de sentimientos y pensamientos profundos. Donde sin darse cuenta se deja engañar y llevar por la eficacia de los logros obtenidos gracias a la técnica y las máquinas, haciendo de ello el único camino posible, sin cuestionarse nada de esa realidad fría-estática y superficial, creyendo es la solución a todos sus problemas. Y los síntomas que se van manifestado a causa de ello y vamos omitiendo, que simplemente representan la punta del iceberg de ese consumismo tecnológico (lo visible), pero no se habla de la gran masa sumergida, o del real mar de fondo, que sería ; «la manipulación no consciente de las mentes»-.
  • Así va tomando forma su careta de Identidad Tecno, más aún hoy con el bombardeo cerebral que significan los juegos electrónicos y pasatiempos en las redes sociales desde cualquier celular, donde se fomenta y potencian con otros cientos de miles a diario que así lo van convalidando, convencidos se trata simplemente de juegos para entretenerse, desconociendo se van perdiendo y transformando en eso que consumen la mayor parte de tiempo.. «máquina y técnica«, creyendo que lo tienen controlado, pero desconocen las máquinas tienen suficiente información que les permite controlar y dominar el criterio de realidad de esas identidades tecno. Esto conlleva a otorgarle tanto poder a la técnica como a las máquinas, que los van alejando cada día más de pensar y descubrir desde cada uno, que tendría que ver con procesos afectivos y mentales profundos (subjetividad creadora innata), algo esencial en el ser humano, el cual se va perdiendo por dejarse maravillar por la innovación y avances tecnológicos. Los cuales son importantes, pero como complemento de una genuina creatividad humana, cuyo proceso sea el descubrimiento de una auténtica identidad por sobre una identidad y realidad virtual.

• Careta Líquida: Aquellos que con su buen hablar nos endulzan los oídos seduciéndonos, con una supuesta gran capacidad de imaginar y sentir toda la realidad, fomentando la libertad y el «vivir el aquí y ahora», de un eterno presente que descarta el pasado y el porvenir, suelen mostrarse siempre contentos y sin problemas desde esa ilusoria realidad. De una hábil y seductora retórica formal-exhibicionista centrado en lo diferente, lo insólito o marginal. Quienes suelen tener siempre bajo la manga frases cliché de motivación o autoayuda,. Su pensamiento; suele ser una foto o fragmento de la realidad la cual y, desde su discurso ambiguo, contradictorio y sin contenidos suele resultar suficiente para creerse la película completa de la realidad.
• Mayormente pensando como exhibirse socialmente, logrando así tantos seguidores los aplaudan y sigan, quienes sin darse se cuenta imitan e identifican, potenciando esas estructuras tan superficiales se clonen, siendo hoy un espacio más que propicio las redes sociales, los medios tradicionales para sus grandes exhibiciones, donde se profundiza y viraliza cada vez más el narcisismo, y sólo importa «El Packaging» del producto que se exhibe, creyendo ello es lo esencial y original.
  • Su identidad líquida sostenida por pedacitos sueltos que va tomando de una ficticia realidad, que conlleva a un fascinante sometimiento a la moda, y cambiar todo el tiempo para que nada cambie de fondo. Pensamientos que sobrevaloran las formas; el hablar bonito, su imagen, lo fascinante, lo superficial, la transgresión. De un Sin vida propia (sin contenidos) – pendiente de las miradas y vida de los demás. Al no generar sus propios contenidos y organizarlos, su identidad líquida se diluye rápidamente y es un comenzar desde cero nuevamente, confundiendo las imágenes sueltas suyas y de otros con la serie completa de ficción.
  • En ese contexto se fomenta y transmite una identidad y creatividad fragmentaria y fugaz. Acorde a una Subjetividad caótica y anárquica, donde solo importan las formas, desvalorizando los procesos de afectos y pensamientos profundos, que les suelen resultar insoportables, acompañado de una Energía Incontenible que se les escapa como esquirlas de una bomba que se esparce por el aire, al punto de quedar rápidamente vacíos y así van conformando nuevas mascaradas de amor cada vez más frágiles e incontinentes buscando otras máscaras que los complete para Ser.
  • Estructuras que suelen considerarse las más evolucionadas y creativos por expresarse libremente sostenidos por el Yo siento (Narcisista), que va desplegando desde esa fascinante pseudo libertad, de la cual, sin darse cuenta, se encuentra cada vez más prisioneros de sus pensamientos.

Aunque muchas veces nos vayamos acostumbrando a utilizar esas máscaras, hasta la naturalicemos, en algún momento deberían resultar insostenibles e insoportables, justamente porque quizás ya reconozcamos no necesitamos tapar más ese profundo sentir y pensar de la vida desde una posición más Auténtica.

Máscaras que ya no se podrán sostener ante la intensa necesidad de Descubrir; nos descubran y reconozcan por nuestra autenticidad, esa esencia creadora innata por naturaleza, lo más bello y auténtico de nuestro Ser que pide a gritos salir, para no continuar repitiendo la historia, sino recrearla por nosotros mismos, en camino a descubrir ese Ser Auténtico.

Siendo este un punto de partida para replantearnos nuestra historia, desde pequeños, por lo general no se nos enseña a pensar por nosotros mismos, siendo adoctrinados por lo social y cultural para repetir, y sin darnos cuenta seguimos transmitiendo las mismas creencias y mandatos estáticos ancestrales a las siguientes generaciones.

Esto me hace reflexionar e invito hacerlo; Humanamente estamos evolucionando o involucionando?, desde donde conjeturo; de manera no consciente, primitivamente vamos clausurando nuestras enormes potencialidades para repensarnos creativamente, descubrir y recrear nuestro pasado en camino hacia un esperanzador porvenir, que nos permita ir accediendo a lo más genuino de nuestro Ser.

Quizás podríamos comenzar por considerar algunos de estos Pasos hipotéticos que presento a modo de un inédito sistema para repensarnos-observarnos desde un lugar hasta ahora desconocido al ojo humano.; Esas mascaras de identidad que hasta hoy venimos utilizando ¿no serían justamente la que nos distorsiona la realidad ? y las limitaciones que ello conlleva, siendo una de las principales, nos impide descubrir por nosotros mismos, una inédita realidad, y que ello nos vaya acercando hacia una profunda verdad.

Un primer gran paso en dignidad, sería reconocer las caretas que utilizamos, intentar trascender nuestra personalidad narcisista y la aparente realidad que se va conformando, fomentando ese individualismo competitivo feroz, donde sólo importa nuestra propia supervivencia, un ir tras la zanahoria del consumo, provocado por la inmediatez por las cosas, saciar esa necesidad de querer todo ¡ ya, ahora !, no permitirnos disfrutar de las cuestiones sencillas de la vida, por estar pensando siempre en lo que nos falta, ideas-pensamientos-fantasías cotidianos que van distorsionando el criterio de la realidad.

En este contexto invito a reflexionar, si cada máscara tiene sus propias características, ¿Cómo sería cuando se van relacionado socialmente con las otras de diferentes identidades-creencias?, si hablo de nuestras relaciones y cuales podrían ser los hipotéticos efectos y noción sobre lo; Bueno, Malo, Sano, Realidad, Ficción, Autenticidad, Creatividad..etc.

Las siguientes citas de Einsten quizás ayude a contextualizar las hipótesis esbozadas:

“Debo estar dispuesto a renunciar a lo que soy con el fin de convertirme en lo que seré”.

“El mundo como lo hemos creado es un proceso de nuestro pensamiento. No puede ser cambiado sin cambiar nuestro pensamiento”.

“Todo aquello que el hombre ignora, no existe para él. Por eso el universo de cada uno se resume al tamaño de su saber”.

Albert einstein

Ampliando las Hipótesis; al tratarse de un Ser Auténtico que habita en nosotros y que hasta ahora desconocemos, donde habita lo más puro y sano de nuestro Ser (frágil), es que necesitamos cubrir con mascaradas de identidad, creyendo sería una solución, así el personaje y la obra se terminan devorando al «Auténtico Ser Humano Actor» que deberíamos Ser. (Parece ficción, pero es real)

Existiría en nosotros una Vital Esencia de lo Originario-Auténtico que no necesita máscaras para Ser, pero si necesita sea reconocido y valorado con parámetros Humanos que hasta ahora eran desconocidos, para ello es necesario ponernos en juego valientemente y dejar de depender de la mirada del otro para sentirnos alguien, algo que socialmente resulta cada vez más degradante en la humanidad.

Que sea un continuo transitar el ir descubriendo una auténtica identidad, algo que trascienda lo biológico y las actividades que desarrollemos, a través de una guía hipotética (como ésta), no recetas para copiar, sino para crearlas desde nosotros, que se vaya transmitiendo y despertando genéticamente esa semilla de autenticidad para que florezcan las ganas y la pasión por redescubrirnos, en camino hacia cada vez más personas sensibles-creativas impulsadas por la Humanidad que les brota por los poros, que nos sorprendan por ese original sentir y pensar la vida mientras se va poniendo en práctica en lo que hagamos.

Transmitir-enseñar algo tan esencial en lo humano para que otros los vayan desplegando y contagiando en la vida, dejar una huella viva en el recuerdo de los demás por su autenticidad, y que ello sea un impulsor de una inédita dinámica de descubrir – descubriéndonos mutuamente.

Potenciar nuestras auténticas identidades así ya no necesitemos utilizar máscaras para protegernos de una aparente realidad que nos manipula y aplasta a diario sino, ir descubriendo otra inteligencia más evolucionada, donde habita lo más sano y digno en nosotros, que nos permita ir construyendo en reciprocidad una inédita realidad que hasta ahora desconocemos.

Así se vaya despertando y promoviendo un proceso de descubrimiento continuo y profundo de lo mutuo, que nos permita ir interactuando con una inédita realidad que nos llama e invita a desplegar lo más genuino de nuestra esencia humana, esa enorme capacidad para mutar hacia lo esencialmente humano.

No quedarnos observando como mutan los virus y nosotros adaptarnos a ellos, sino animarnos en desplegar y activar ese genoma humano heredado que nos impulsa transformarnos, así no quedarnos como simples espectadores de la vida.

Nos vayamos acercando de a poco a un Ser auténtico, cuya hipotética identidad se potencie mutuamente con otras almas que así lo vayan reconociendo y valorando, en camino hacia una humanidad que así vaya evolucionando, con valores y parámetros humanamente que se perciban y vivencien más auténticos y esperanzadores.

Para que el Descubrir nuestra Auténtica Identidad, se vaya transformando en un bello y profundo desafío de arriesgarnos a Ser.

Gracias por acompañarme hasta aqui.

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